Cómo conservar y guardar muebles durante el invierno

Inmersos en la recién estrenada temporada de otoño, llega la hora de guardar muebles de exterior, testigos de los momentos más relajantes y divertidos de la temporada primaveral y veraniega que más hemos saboreado en los últimos años tras la pandemia.

En KACTUS REPUBLIC os recordamos que tan importante es la elección del material a la hora de elegir nuestros conjuntos de jardín así como su posterior mantenimiento.  Una vez finalizada la temporada del buen tiempo es la hora de conservar nuestros muebles para que así tengan una vida más duradera y feliz.

Basta con un sencillo mantenimiento, independientemente de que se trate de un sillón de jardín, una mesa exterior, un sofá de teca, una silla de ratán, una hamaca de jardín, bancos de teca, etc.

Por esa razón, en KACTUS REPUBLIC te ofrecemos una serie de consejos para que tus muebles hibernen de la mejor manera y ofrezcan las mismas prestaciones cuando los desenfundes de cara a la próxima temporada.

Ten en cuenta la importancia que tiene cuidar ese mobiliario de exterior que ha convertido en deliciosas tus reuniones en el jardín durante este verano. Nuestra guía de mantenimiento pretende que el próximo año presenten el mismo confort y brillen como el primer día. Todo depende del adecuado tratamiento y conservación que le dispenses durante los meses de más frío.

 

Consejos para guardar muebles durante el invierno

Manual de mantenimiento

De la misma forma que fue importante apretar debidamente los tornillos de los muebles durante su ensamblaje inicial el día que los recibisteis, debes asegurarte que están bien apretados antes de guardarlos, igual que los pernos. Aplicarles un lubricante o producto antioxidante es aconsejable para su mejor conservación, sobre todo si los apilamos en espacios húmedos.

Este mismo procedimiento lo aplicaremos a los muebles de exterior que decidamos dejar al aire libre porque aún apuramos algún día festivo o puente para visitar nuestra residencia vacacional o bien porque es nuestra residencia habitual. Si, por el contrario, vamos a cerrar la casa durante un tiempo prolongado durante las estaciones de otoño e invierno, es recomendable usar fundas de muebles de jardín. Esto es más que recomendable porque nos permitirá prolongar la vida de nuestro mobiliario.  Además, evitará que se ensucien por lo que su limpieza y mantenimiento será menos prolongado. Eso sí, no te olvides de retirar los almohadones de los sofás, hamacas o sillones y consérvalos en el interior de la vivienda.

Un buen cepillado antes de retirarlos

Cuando vamos a hibernar nuestros muebles es mejor que pasen por el ‘tren de lavado’ casero. No te quitará mucho tiempo: su limpieza es relativamente sencilla. Bastará con un poco de tiempo antes de ‘aparcarlos’ hasta la próxima primavera.

De este modo, os recomendamos que utilicéis cepillo de plástico de cerdas suaves (nunca cepillo con cerdas de alambre o gruesas) para limpiar esos rincones inaccesible y para los que no basta una simple bayeta. Basta con emplear los cepillos de dientes para limpiar los muebles o sillas de ratán trenzado. Estos cepillos tienen el tamaño ideal para acceder a los rincones y grietas.

Cómo limpiar el ratán artificial

No reviste dificultad alguna su mantenimiento. Emplearemos agua y jabón con un paño o esponja y procederemos a su posterior secado con un trapo. Es la mejor manera para que te ayude a conservar su aspecto inicial. Las zonas de más difícil acceso, como son las esquinas o la parte baja de  los reposabrazos. Se pueden limpiar con un cepillo de cerdas de plástico blando. Lo dicho, no tires los cepillos de dientes.

Cómo conservar el ratán natural

Este tipo de mobiliario se puede limpiar igualmente con agua y jabón, con un paño o esponja, si bien debes asegurarte de que están bien escurridos. Nunca debe estar empapado. Ten en cuenta que al ser un material natural, absorbe el agua y esto puede provocar su deterioro y posible aparición de moho.

Esta es la principal razón por la que debemos proteger nuestros muebles con una funda y almacenarlos, preferiblemente en el interior de la casa al final de la temporada de verano. Menos aconsejable es dejarlos sólo a cubierto, sobre todo si nos vamos a ausentar un largo tiempo de nuestra zona de veraneo.

Cuidado con el agua si el armazón del mueble es de aluminio

Otro cuidado que requieren los muebles de exterior afecta a aquellos con estructura de aluminio, la inmensa mayoría. Por lo tanto, si el marco de los muebles es de este material –independientemente se trate de un sofá, sillón o sillas- es aconsejable emplear un aceite lubricante para conservar mejor la superficie. Un método que hay que aplicar tanto cuando se estrenan después del ensamblaje como a la hora de guardarlos.

Además, cuando llega el frío y si estamos en una zona húmeda, tendremos cuidado al almacenar los muebles de aluminio con estructura hueca. ¿Por qué? Porque si los almacenamos o conservamos al revés (boca abajo) podría provocar que  el agua de la propia humedad se congele y pueda dañar su estructura, agrietándose las juntas o el propio marco.

Por ese motivo, se recomienda mantener los muebles  en la posición de origen, como si hiciéramos uso de ellos, para que en el caso de que filtre el agua, esta desaloje correctamente.

Cómo limpiar el aluminio

Para la mejor conservación de los conjuntos de jardín con estructura de aluminio no le des muchas vueltas. Simplemente límpialos con agua jabonosa, enjuágalos y sécalos con un paño que no deje pelusa, al aire libre o bien, ya metidos en faena, con un secador de mano. Cuando ya esté bien seco, pondremos el conjunto de jardín a cubierto, en el interior para protegerlo de las humedades y el mal tiempo.

 Qué hacemos con los conjuntos de teca

Sabrá que la teca se trata de uno de los materiales más duraderos para los muebles de exterior. No obstante, todo lo que se expone a las condiciones del tiempo sufre y desgasta. Cuando se expone al sol, es posible que observe que la teca adquiera un  color grisáceo. No se asuste, ya que es totalmente natural y la integridad física de la madera no se altera. Cuando sea necesario, se puede limpiar la madera usando cepillo de cerdas de plástico suave y agua jabonosa.

Recuerda que debe estar bien seco y libre de impurezas como polvo antes de aplicar cualquier producto protector para su mejor conservación. Para las manchas más fuertes se le puede aplicar arena fina, ligera o un estropajo natural no abrasivo. Deberás hacerlo en la misma dirección de las vetas. ¿Cómo reconocer hacia qué dirección? Basta con pasar los dedos por la superficie en esa dirección donde el tacto es más suave.

Esperemos que nuestros consejos te hayan servido para que tus muebles presenten la próxima temporada un mejor aspecto.